En este segundo volumen, Taichi sigue participando en este "mixer" de chicos, donde las situaciones incómodas, las bromas y los momentos de tensión aumentan. Además de sus interacciones con otros participantes, Taichi comienza a desarrollar sentimientos por algunos de los chicos del grupo, mientras se enfrenta a su propia confusión sobre lo que busca en una relación. Los personajes secundarios también tienen sus propias subtramas, lo que ayuda a profundizar en sus personalidades y sus propios conflictos internos sobre el amor y la amistad.
Este volumen de How I Attended an All-Guys’ Mixer mantiene un tono ligero y cómico, pero también toca temas sobre la identidad, la conexión emocional y las relaciones en un contexto que permite reflexionar sobre las expectativas sociales y las dificultades de encontrar el amor en un entorno competitivo y a veces incómodo.